Los hombres se disponían a recoger 250 millones de pesos, que serían entregados por una empresa.
Dos presuntos integrantes del Eln, quienes extorsionaban a un consorcio de obras civiles, fueron dados de baja por tropas de la Novena Brigada en zona rural del municipio de San Agustín, en Huila.
Las acciones extorsivas condujeron al Gaula de la Novena Brigada y al CTI de la Fiscalía a planear y ejecutar una operación que concluyó con la muerte de dos guerrilleros, en el momento que recibían una gruesa suma de dinero, el cual fue recuperado.
Las acciones extorsivas condujeron al Gaula de la Novena Brigada y al CTI de la Fiscalía a planear y ejecutar una operación que concluyó con la muerte de dos guerrilleros, en el momento que recibían una gruesa suma de dinero, el cual fue recuperado.
La exigencia era del orden de los 1.000 millones de pesos y la hacía, a través de llamadas telefónicas, un desconocido que se identificaba con el alias de Camilo, quien afirmaba que hacer parte del frente ‘Manuel Vásquez Castaño’.
“El guerrillero decía que si le daban esa suma de dinero, el Eln permitiría ejecutar las obras civiles en San Agustín”, afirmó la Novena Brigada, que agregó que también se comprometieron a no quemar la maquinaria de las obras y respetar la vida de los empleados de la empresa, cuyo nombre se mantiene en reserva.
Por las amenazas e intimidaciones, el consorcio accedió a pagar 500 millones de pesos en dos contados de 250 millones y los delincuentes concedieron dos semanas de plazo para los pagos en efectivo.
El primer pago debía hacerse efectivo el 30 de agosto, por lo que a lo largo del día los integrantes del consorcio recibieron llamadas con instrucciones del sitio donde debía darse la entrega de la cuantiosa suma y era tal el temor a la intervención de la Fuerza Pública que en tres oportunidades cambiaron el sitio de encuentro.
Por las amenazas e intimidaciones, el consorcio accedió a pagar 500 millones de pesos en dos contados de 250 millones y los delincuentes concedieron dos semanas de plazo para los pagos en efectivo.
El primer pago debía hacerse efectivo el 30 de agosto, por lo que a lo largo del día los integrantes del consorcio recibieron llamadas con instrucciones del sitio donde debía darse la entrega de la cuantiosa suma y era tal el temor a la intervención de la Fuerza Pública que en tres oportunidades cambiaron el sitio de encuentro.
El guerrillero decía que si le daban esa suma de dinero, el Eln permitiría ejecutar las obras civiles en San Agustín
“Las labores de inteligencia nos llevaron a sorprenderlos y uno de los sujetos desenfundó su arma de fuego contra las unidades militares, finalizando todo con la neutralización de los dos hombres encargados de recoger el dinero”, aseguró la Novena Brigada, que también incautó una motocicleta y un arma de fuego corta.
Fuente: eltiempo.com